En sus 105 años de vida “Dios me ha enviado a la tierra para servirle a Él”
El 16 de abril de 1910 nació Marco Antonio Sánchez Bohórquez en Somondoco Boyacá, a sus 105 años de vida tiene sus manos llenas de frutos para entregarle a Dios, el que más resalta es “el honor de ser patriarca” tiene 15 hijos, 69 bisnietos y 25 tataranietos.
A Don Marco Antonio o Marquito como le dicen con cariño, Dios le dió la gracia de celebrar sus bodas de diamante 75 años de vida matrimonial. Fue alcalde de varios municipios en Boyacá, notario, juez de la República y expositor de historia en el Puente de Boyacá.
Su gran pasión son la música y la lectura, ejecuta instrumentos de cuerda tales como: el tiple, requinto y un instrumento diminuto de cuerda que por carecer de nombre, él lo llama "la chinita"; también toca el tambor, las maracas y la armónica.
Es también compositor de versos, a sus 100 años se editó una compilación de sus escritos. Ha compuesto dos canciones dedicadas a su esposa, así: La primera cuando se casó, hace 81 años titulada "Te Adoro con Frenesí” y la segunda, "A Julita" después de la pascua de ella (hace 5 años).
Marco Antonio Sánchez Bohórquez es una persona alegre, todo lo disfruta; un testimonio de fe y de oración permanente, con un amor por la Virgen que le inculcaron desde niño, reza el rosario todos los días y nunca le falta sus tres ave marías.
A continuación les compartimos algunas de sus respuestas en el especial que El Catolicismo le ha querido hacer como homenaje por responder al llamado del Plan de Evangelización de la arquidiócesis de Bogotá: “ser sal de la tierra y luz del mundo en Jesucristo, para que todos en Él tengamos vida”.
Escuche la entrevista completa, donde algunos de sus hijos también intervienen:
Se imaginó que iba a llegar a los 105 años de vida:
Lo que disponga la divina providencia, mi corazón está con Dios y con las personas de bien. Llegar a la gloria del Cielo.
En 105 años, lo que más le agradece a Dios:
Los 105 años de vida.
Para sus hijos es un gran testimonio de fe, armonía, le gusta el compartir, el ser solidario, la oración, la eucaristía como centro principal y el buen ejemplo que nos les da cada día.
Le preguntamos sobre los 75 años de vida matrimonial, su recomendación para la vida en pareja:
Para llegar a las bodas de diamante no es sino tener una vida buena y ordenada y lo que dispone Dios cuando uno le pide a él que le ayude y acompañe en este valle de lágrimas.
El ser esposo y papá:
Me siento bien como esposo, tuve una esposa bien, buena que me la dio Dios, con ella tuve los hijos que son 15. El centro de su vida es Dios.
¿Cómo vivir la fe entre esposos y la familia?:
Un acuerdo con ella, lo demás lo dispone El por medio de los vínculos matrimoniales.
¿Cómo educar a los hijos en el amor a Dios?:
Educarse uno primero para tener capacidad de indicarles el camino que deben seguir y darles una buena educación que corresponda a la fe divina de Dios.
Elizabeth una de sus hijas, quien es seglar de la comunidad de las carmelitas misioneras nos contó:
“Mi padre conoció a mi madre en el templo, ella era monaguilla en el templo le pidió a Dios que le diera una buena esposa y él siempre se refiere a esa bendición de encontrar a mi madre para llevar una relación de comprensión, mutuo respeto, dificultades que no han de faltar, pérdida de los hijos. Como el siempre nos ha enseñado: Perdemos los bienes, seres, tenemos dificultades pero la fe nunca. Es un estribillo que se ha convertido en su línea de vida, hace 5 años falleció mi madre y Dios así lo quiso, el dice los dos estábamos preparados para esa vida eterna, ella se fue primero” y sobre esto, ella dice que la fe de su padre ha sido inquebrantable.
Ella resalta el ejemplo que recibieron desde pequeños, cuando les preguntan en qué momento tuvieron su conversión, responden que no hay un momento específico porque desde pequeños tuvieron el ejemplo de la oración con ellos, “al amanecer, en los alimentos, al terminar el día, al salir de la casa, mis padres siempre personas orantes, fortalecer la fe en todo lo que ocurre en nuestras vidas al estar en las manos de Dios, si esa es su voluntad siempre estar dispuestos a aceptarla, ahora con la viudez gracias a Dios se ha sostenido muy firme, dentro de esa esperanza que siempre tiene en Dios, el dice quien tiene a Dios en el corazón y que nada le puede faltar”.
La Palabra de Dios abierta en la sala de música donde lo entrevistamos, el Evangelio se hace vida.
¿Quién es Dios para usted?
Para mí, Dios me ha enviado a la tierra para servirle a El. Cómo le servimos a Dios, con Fe, manejarse uno bien con la sociedad y pensar bien, permanente a Dios como autor de nuestra vida, para eso nos dio la vida para vivir en este mundo y que le sirvamos para ir al cielo algún día.
Venimos a este mundo con una misión, ¿cuál cree que fue su misión en la tierra, cuál es su misión acá?
Cumplir mis deberes como ciudadano en este mundo y cuáles son mis deberes en este mundo son los de alabar a Dios en la primera medida, comportarme bien con la sociedad y pedirle a Dios que nos mantenga con buena salud mientras vivimos aquí y que nos de buena vida para ir al cielo.
¿Es usted feliz?
Claro que sí, soy feliz con tener una familia arreglada en su sentido espiritual, de fe para con Dios, de reconocer el camino que debemos seguir de la tierra al cielo.
¿Un hecho en concreto que le haya dado gran felicidad, el momento más feliz de su vida?
La fe en Dios y el cariño que recibí de mi esposa cuando vivía y de mis hijos que están presentes.
Momento de tristeza, de dolor:
Cuando murieron mis padres, mi madre, mi esposa y cinco hijos.
Un hombre de fe que tiene esa certeza en la Pascua, en que Cristo ha vencido la muerte y cómo también usted ha pasado esos momentos de dolor fortalecido en el Señor:
Como dice usted, Dios ha vencido la muerte y nos ha dado la vida no solamente en la tierra, sino de la tierra al cielo.
Usted menciona de manera muy bella ir al cielo ¿Cree que es posible la santidad?
Yo creo que sí en algunos, lo demás no soy yo el llamado a juzgarles la conducta, el llamado es Dios y yo con mis hijos si me tengo que darle sus bendiciones que me pidan y estar contento con ellos.
¿Don Marco qué es la santidad?
La santidad es la oración, la fe con Dios, de habernos mandado a este mundo para saber que tenemos que tener fe con Dios, para orar, para conducirse uno de una manera santa.
Necesitamos de estos santos en vida, papás, mamás…háblenos de esa labor tan bella como líder, alcalde, háblenos de esta experiencia:
Desde pequeño me gusta ser autodidacta, me he preparado para ser lo que he sido. Alcalde, juez, notario público, orador.
¿Qué le diría usted a nuestros gobernantes, en esta búsqueda de la paz? Cuál sería su mensaje.
Para los gobernantes que sepan gobernar y saber gobernar, no saben y por eso gobiernan mal.
¿Qué les recomiendan para que gobiernen bien?
Que se preparen bien y que no piensen mucho en la plata, porque eso es lo que les pierde y Dios los castiga.
¿Cuál es la solución para lograr la paz?
Siendo justo…Que dejen pensar tanto en la plata y se preparen para servir a la sociedad…
El mensaje para sus seres queridos:
Oren a Dios y me acompañen.
El mensaje de los hijos para don Marco:
“Gracias por el testimonio de vida que les ha dado, por la esperanza y fortaleza en Dios, por enseñarles que cuando las cosas terrenales se acaban la misericordia de Dios abunda”.